Un ordenamiento de un territorio es el de establecer sitios que en base a sus características ambientales, recurso, potencialidades y vocación, se les asigna actividades en beneficio y desarrollo que satisfagan a la sociedad. En la América Andina, es el resultado de un proceso milenario, con alcances relevantes para la actualidad como los asentamientos humanos y las vías. Todo eso forma parte de un proceso de desarrollo cultural.
Existe un trazado, el de los “Caminos de Viracocha”, que posiblemente fue un fundamento importante para el ordenamiento territorial implementado en la América Andina Prehispánica. A saber, Viracocha fue una deidad espiritual que cuidaba el orden, la salud y el bienestar del Tahuantinsuyo, por ello recorría el territorio a través de los caminos imaginarios. Los “Caminos de Viracocha” estaban determinados por hitos alineados sobre el terreno, tales hitos eran lugares sagrados o llamados huacas (volcanes, montañas, adoratorios). En estas huacas se cruzaban o coincidían los “Caminos de Viracocha” con los caminos de los hombres.
Las siguientes son tres leyendas sobre la fundación de Quito que, vendrían a corroborar el hecho de que las alineaciones, de las que se habla, hayan sido consideradas como “Caminos de Viracocha”:
1. El curaca (cacique) de Cangahua inspirado por los dioses lanzó una vara y fue a clavarse en el sitio donde hoy está Quito y así nació la ciudad: Cangahua está en una alineación que nace en el nevado Cayambe, pasa por las ruinas arqueológicas de Pambamarca, luego por el Quinche, Guápulo, Plaza Grande de Quito, El Cinto y termina en Lloa. Es además, coincidente con la avenida Gran Colombia y con el tramo de la Guayaquil hasta la Plaza del Teatro.
2. Inspirado por los dioses, el curaca (cacique) de Cochasquí lanzó una chasca (piedra aerolito) y fue a caer a las faldas del Pichincha y allí fundó Quito: Cochasquí está en una alineación que pasa por la cima de los volcanes: Imbabura, Mojanda y Atacazo; por la cima del Panecillo y la Plaza Grande de Quito. Coincide perfectamente con la calle Venezuela desde la Manabí hasta la Rocafuerte.
3. El curaca (cacique) de Pachusala cogió una piedra que había sido arrojada por el volcán Cotopaxi y la lanzó desde el cerro de El Callo hacia el norte y fue a caer en las faldas del Pichincha, donde se fundó la ciudad que es Quito: Pacgusca es la actual hostería de San Agustín del Callo ubicada cerca de Laso, al pie del Cotopaxi; su ubicación coincide con una enorme alineación de más de 700 km. que viene desde Chiclayo, Perú; pasa por: Loja, Cuenca, Cañar, Alausí, La Unión, Latacunga y termina en la Plaza Grande de Quito; es coincidente con el tramo de la calle Maldonado desde la Plaza de Santo Domingo hacia el sur. En el Centro Histórico los hitos urbanos que la determinan son: Plaza de la Recoleta, Plaza de Santo Domingo y Plaza Grande.
Cuando España adquirió el compromiso de evangelizar a los aborígenes encontró la dificultad de que vivían en campos dispersados; ante eso optaron por crear núcleos y asentamientos urbanos para concentrar a la población indígena. Así aparecieron los Corregimientos, las Reducciones, las Doctrinas, Virreinatos, Capitanías Generales, Real Audiencias y Gobernaciones. Los españoles aceptaron porque eso facilitaba su tarea evangelizadora, construyendo sitios cristianos en reemplazo de los sitios de idolatría. Por otro lado, Peñaherrera sostiene que muchos han manifestado que estas alineaciones establecen canales de fuerzas telúricas.
El estudio de los “Caminos de Viracocha” constituye un patrimonio que nos revela aspectos de nuestra identidad.
Revista del Movimiento Sumak Ecuador
Mushuk Nina
Fuego nuevo Nº 1
Arq. Andrés Peñaherrera